jueves, 19 de mayo de 2016

BLOQUE 2 - TEMA 1



Escuela promotora de hábitos saludables


La Educación para la Salud, del Consumidor y del Medio Ambiente es el resultado de una nueva filosofía, en la que el docente además de trabajar en el desarrollo personal de las alumnas y alumnos, participa en las acciones tendentes a mejorar su calidad de vida y preservar el entorno. Para ello, la formación del profesorado es crucial para llevar a cabo una Educación para la Salud, del Consumidor y del Medio Ambiente de calidad en las escuelas.




Existe consenso acerca del importante papel de la Promoción de la Salud y en concreto de las acciones de Educación para la Salud, del Consumidor y del Medio Ambiente desarrolladas en la escuela, para la formación integral del alumnado. Los comportamientos espontáneos no aseguran el máximo de salud de las personas, así como tampoco los hábitos de consumo saludables y la protección adecuada y respeto del medio ambiente. De ahí la necesidad de que la educación formal obligatoria incorpore la salud entre sus objetivos. 

La escuela es un escenario adecuado para llevar a cabo este tipo de Educación ya que, hoy en día, todas las personas pasan por la escuela; la edad escolar es la más apropiada para acoger y adaptar nuevos modelos de vida; la escuela es un ambiente que permite vivir situaciones favorables para promover la salud y evitar el malestar o la enfermedad; se generan actitudes positivas hacia el cuidado personal y comunitario y se desarrollan conductas responsables con uno mismo y con su entorno.





Entendemos por Escuela Saludable un lugar que posee un ambiente sano donde se aprende de manera saludable y solidaria con el entorno, por lo tanto, la salud, el consumo y la protección del medio ambiente deben estar presentes en la propia vida del centro.
La Escuela Promotora de Educación para la Salud, el Consumidor y del Medio Ambiente debe contribuir al desarrollo de la salud y consumo responsable de su alumnado y la protección del medio ambiente, promoviendo actitudes y conductas que lo posibiliten.
Promocionando hábitos de vida saludable y responsable con el consumo y con el medio ambiente, como por ejemplo:
  • Alimentación saludable en el comedor.
  • Posibilidad de higiene bucodental después de las comidas.
  • Duchas después del ejercicio físico.
  • Elección del tipo de papel a emplear y posibilidades de su reciclado.
  • Separación de residuos en distintos contenedores para su posterior reciclaje.
  • Utilización mesurada de agua y energía


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